jueves, 7 de febrero de 2008

El Gatamelata

2 comentarios:

  1. Esta obra es el Gattamelata, una estatua equestre del la epoca del Renacimiento cuyo autor es Donatello y se encuentra situada en la plaza del Santo en Padua.

    Se trata de una escultura de bulto redondo
    realizada en bronce con unas dimensiones de 340 x 390 cm, y se apoya sobre un zócalo de base de 7,80 x 4,10 metros.
    Se erige sobre un bloque cuadrado solo roto por la diagonal del bastón y la espada.

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  2. El naturalismo y la serenidad del jinete y del caballo son típicas del Quattrocento y la psicologia del personaje representado es característica de las obras del autor.
    Es un retrato y está realizado para glorificar al personaje representado. También se trata de resaltar la virtudes del militar, que conduce al caballo sin violencia pero con autoridad.Esta obra trasmite una intensa sensacion de equilibrio y quietud. La imagen conjuga el ideal y la realidad.

    El guerrero se mueve lentamente, en una marcha de conquista, unido al caballo que avanza firmemente y sin excitación. La lentitud de la marcha del caballo, la calma de todo el conjunto deja claro al espectador que la victoria del Gattamelata es la victoria de un hombre que ha triunfado gracias a su inteligencia.

    Se erigió en honor del condottiero de la república véneta Erasmo de Narni después de una elaboración que duró desde 1447 hasta 1453.
    Estilísticamente está relacionada con la escultura romana, pues está inspirada en la escultura ecuestre de Marco Aurelio.

    Donatello abandona aquí la estatua funeraria para erigir una escultura ecuestre como las que Roma destinaba a los emperadores. Y así crea el primer gran retrato ecuestre escultórico del Renacimiento y la primera estatua en honor a un guerrero del mundo moderno.
    El monumento está proyectado para perpetuar la fama de este gran soldado del ejercito veneciano que acababa de morir. El rostro es el de un hombre avanzado en años. No se trata en este caso de una representación realista de las auténticas facciones del condottiero, sino más bien de una madurez conquistada con los años.

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